Cuando el arte se convierte en un puente entre la educación y la comunidad, el aprendizaje trasciende las aulas. Así ocurrió el pasado sábado 5 de julio de 2025, cuando un grupo diverso de estudiantes del Instituto Superior Tecnológico Quito Metropolitano vivió una jornada inolvidable en el Circo de Luz, celebrado en el Coliseo de Lloa. Este evento no solo fue un espectáculo cargado de alegría y creatividad, sino también una oportunidad significativa de vinculación con la sociedad.
Estudiantes de las carreras de Marketing, Educación Inicial, Educación Básica y Redes y Telecomunicaciones participaron activamente en esta actividad lúdica y cultural, que reunió a jóvenes del sector para disfrutar de una experiencia artística enriquecedora. La jornada combinó entretenimiento con formación, promoviendo valores como la empatía, la inclusión y el compromiso ciudadano.
Un Encuentro Mágico: Arte y Reflexión como Catalizadores de Cambio Social
Durante el evento, los asistentes se maravillaron con acrobacias, malabares, clown, música en vivo y mensajes de reflexión que invitaron a soñar y a valorar la diversidad humana. El Circo de Luz ofreció mucho más que risas: fue una plataforma para que los estudiantes observaran, interactuaran y reconocieran el poder del arte como herramienta de transformación social.
Los participantes destacaron la calidez del entorno y el impacto positivo que generó en los niños y adolescentes presentes. En un espacio lleno de color y dinamismo, se construyó un ambiente de respeto e inclusión, que permitió fortalecer las habilidades blandas y la sensibilidad social de los futuros profesionales.

Un Certificado de Transformación: Aprendizaje y Compromiso en el Circo de Luz
El evento, con entrada gratuita, recibió a un máximo de 30 estudiantes, quienes obtuvieron un certificado de asistencia por su participación. Esta actividad forma parte del plan de vinculación del Instituto, que busca promover experiencias que combinan aprendizaje significativo y contribución al desarrollo social.
Además, los tutores metodológicos de cada carrera organizaron y dieron seguimiento a los estudiantes, asegurando que la experiencia se aprovechara al máximo desde una perspectiva pedagógica y humana. Para los estudiantes de Marketing, por ejemplo, fue una oportunidad para observar la organización y difusión de un evento cultural; mientras que para los de Educación Inicial y Básica, fue un laboratorio vivencial de dinámicas interactivas con la infancia.
El Circo de Luz en Lloa fue mucho más que una salida académica: encendió la creatividad, la sensibilidad y el compromiso de los estudiantes del Instituto Superior Tecnológico Quito Metropolitano. Esta experiencia reafirma el valor de las actividades de vinculación como espacios donde se construyen aprendizajes significativos y se fortalece la relación entre la educación técnica y las necesidades reales de la comunidad. Cuando la formación se combina con la magia del arte, el resultado es una luz que ilumina el camino de todos los involucrados.


