Introducción
Hoy en día, las empresas operan como un conjunto. No existen compañías cuyas operaciones sean realizadas con intervención de una sola persona. De esta manera el departamento de talento humano es el encargado de seleccionar, capacitar, retener, motivar y velar por el bienestar del personal de la empresa.
El capital humano apunta al conocimiento, habilidades, especialización y polivalencia como activo principal de las organizaciones. He aquí la importancia de mantener el capital. Y a la vez surge la duda, cual es la forma correcta de retenerlos.
Una motivación personalizada repercute en el bienestar emocional y aporta un excelente clima laboral a todos los colaboradores.
No a todas las personas les motiva las mismas recompensas ni todos tienen las mismas necesidades e intereses.
Es por esto que la recompensa económica funciona a corto plazo ya que el dinero es un factor común que sirve para satisfacer sus preferencias.
Mas, al largo plazo funcionan otros incentivos como: reconocimiento público, planes de retiro, ascenso laboral, y mayor involucramiento en la toma de decisiones de la empresa.
Estos factores inciden directamente en la seguridad y confort que representa al trabajador y el sentirse a gusto reflejando un mejor empeño y trabajo de por medio.
Cuanta más información personal se obtenga de nuestros empleados más fácil será implementar estrategias enfocadas a satisfacer sus necesidades y ocasionar un impacto positivo en sus vidas y en el trabajo.
La carrera de gestión del talento humano permite formular estrategias y actividades encaminadas a motivar al personal. Así como a implementar acciones complementarias de apoyo para fortalecer la cultura organizacional de la empresa.